Primero tú. El vendedor como persona

Publicado el 12 de mayo de 2025, 13:36

Antes de pensar en clientes, en cerrar ventas o en cumplir objetivos, hay algo aún más importante: tú.

Sí, tú. Porque antes de ser vendedor, eres persona. Y como persona tienes emociones, días buenos y malos, ilusiones, miedos, fortalezas y dudas. Todo eso influye, aunque no lo digas, aunque no lo muestres. Porque cuando sales a vender, no sólo sale tu producto: también sales tú.

Quiero invitarte a que pares un momento. A que te mires, te escuches y te preguntes cómo estás. Porque cuanto más conectado estés contigo mismo, más auténtico será tu mensaje. Y cuanto más te cuides, mejor podrás cuidar a tus clientes.

Tu energía habla por ti

La venta no es sólo lo que dices, sino cómo lo dices. Puedes tener el mejor guion del mundo, conocer perfectamente tu producto, pero si estás agotado, desmotivado o desconectado, se nota. Puedes disimular, pero la energía no miente. La gente lo percibe.

Y lo mismo pasa al revés. Cuando estás bien, se nota también. Tu mirada brilla, tu voz suena con fuerza, tu actitud contagia. Vender desde el propósito no es una técnica, es un estado. Y ese estado empieza por dentro.

Tu herramienta más valiosa eres tú

No es tu catálogo, no es tu coche, no es tu argumentario. Eres tú. Por eso, cuidarte no es un lujo, es parte del trabajo. Dormir bien, alimentarte mejor, moverte, desconectar, tener momentos de disfrute y rodearte de gente que te haga bien… Todo eso no es “tiempo perdido”: es energía que te recarga y te prepara para dar lo mejor de ti.

Una vendedora me contó una vez que, de repente, dejó de vender como antes. No entendía qué pasaba. Hacía lo mismo de siempre, usaba las mismas palabras. ¿Qué había cambiado? Su energía. Estaba agotada. Había dejado el gimnasio, no dormía bien, el ambiente en su empresa era negativo… Le propuse parar un par de días, hacer algo que le gustara, reconectar. ¿El resultado? Volvió con más energía, con otra presencia. Y las ventas volvieron a fluir.

Conócete para crecer

Muchos vendedores llevan en la mochila creencias que los frenan sin darse cuenta: el miedo al rechazo, la necesidad de hacerlo todo perfecto, la sensación de no ser suficiente. Por eso también es clave mirar hacia dentro. No para juzgarte, sino para entenderte y trabajar en ti.

Imagina que eres como un móvil de última generación: con la mejor cámara, el mejor diseño… Pero sin batería. ¿De qué sirve? Sin energía, no funcionas. Y tú eres igual. Puedes saber mucho de ventas, ser muy bueno técnicamente, pero si estás agotado, no darás lo mejor de ti.

No eres dos personas

Una cosa importante: tú no eres una persona en lo profesional y otra en lo personal. Eres uno solo. Lo que pasa en el trabajo te lo llevas a casa, y lo que pasa en casa te lo llevas al trabajo. Por eso es tan importante que te cuides como un todo. No sólo para rendir más, sino para vivir mejor.

Marc, un vendedor con experiencia, vino a verme porque no entendía por qué se había desmotivado. Seguía haciendo lo mismo de siempre, pero no conectaba. Me bastó una pregunta para abrir la puerta:
—¿Cómo estás tú, de verdad?

Guardó silencio… y empezó a hablar. Estaba agotado, desconectado, hacía tiempo que no se cuidaba. Estaba vendiendo en automático. Le propuse algo simple: que se reconectara con él mismo, que hiciera algo que le gustara. Y volvió con otra cara. No cambió su método, cambió su energía.

Cuidarse no es perder el tiempo

Muchos vendedores me dicen: “No tengo tiempo”. Y yo les digo: no se trata de tener tiempo, se trata de darte tiempo. Porque si tú no estás bien, nada va a ir bien. Tu mente no está clara, tu cuerpo no responde, tu actitud se apaga.

Cuando estás bien, todo fluye: escuchas mejor, conectas más, tomas mejores decisiones. Tu empatía crece, tu paciencia también. Y tus ventas, claro, lo notan.

Así que no lo olvides: antes de vender, cuídate. Antes de dar, recárgate. Antes de conectar con otros, conecta contigo.
Porque tú eres tu herramienta más valiosa. Y cuando tú estás bien, todo lo demás también mejora.

Añadir comentario

Comentarios

Todavía no hay comentarios